Las grandes compañías del sector del tabaco están trabajando en el desarrollo de una alternativa al cigarrillo convencional que permita a los usuarios sustituir el humo del tabaco por vapor. El mercado del vapeo está experimentando un imparable crecimiento y sus datos de ventas en los últimos años no dejan de evidenciar su éxito: en el 2018, 9.000 millones de euros fueron recaudados a nivel global y se espera que en 2025, alcance una cifra de negocio cercana a 35.000 millones según la CEO de Imperial Brands, Alison Cooper.
Expansión y crecimiento
Las previsiones apuntan a que la próxima expansión geográfica se dirigirá hacia Europa del Este y que el crecimiento no sería lineal.
Empresas privadas, organismos internacionales y gobiernos defienden distintas posturas; el Ministerio de Sanidad británico y el Real Colegio de Médicos de Reino Unido sostienen que estos dispositivos son la mejor alternativa para dejar de fumar, y son numerosos los informes científicos que concluyen que vapear es un 95% menos perjudicial y que ayuda a los consumidores a abandonar el tabaco.
Crecimiento en el mercado global de los vaporizadores
En el resto del mundo, hay alrededor de 80 países que regulan el uso de los vaporizadores, y en 27 de ellos, como en Brasil, Emiratos Árabes o Turquía está prohibida su venta.
Una parte significativa de la comunidad científica mundial, consciente de que el tabaco es la principal causa evitable de muerte prematura asociada a múltiples enfermedades, plantea reforzar las políticas nacionales de reducción de daños y para ello, apuesta por los vaporizadores.
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